"La metáfora surge del techo y aniquila toda redención de la imaginación premeditada. La mira y no la toma. Se acerca y lo huele. Huele a menta. Huele mal. Huele a miedo. El nicho existente crece. Sus huesitos se achican. Los ojos se alargan como elásticos. El chicle está atorado en su garganta, y su otro yo lo trata de ayudar." (Sandricuentos 305)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Los Sandricuentos son microtextos que están numerados para su identificación. Comente, comparta su nombre y no ponga enlaces con otras URL ¡Gracias! ©