LIBRETAS

martes, 5 de mayo de 2020

Su aliento de vida...

Su aliento de vida lo dejó perplejo. La ciénaga evaporaba sus aleteos al compás de su respiración. El roce de seda tocaba su espalda y un frío súbito lo envolvía. ¿Quién eres? ¿Por qué estás aquí? Ella no supo qué contestar, pero tal vez algún día lo haría (Sandricuentos 517).





No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Los Sandricuentos son microtextos que están numerados para su identificación. Comente, comparta su nombre y no ponga enlaces con otras URL ¡Gracias! ©

AQUÍ, SANDRICUENTOS POR MES Y AÑO EN CUADRO EMERGENTE: