El sol le habló y dijo: eres la flor de tu propio paisaje. Nadie podrá forjar tu destino excepto tú misma. Echas a volar tu imaginación... Tus logros, tus anhelos, tus libertades. La libertad que hoy se necesita y la sientes en tu interior. Libertad de hablar, de mover, de hacer, de crear, de amar y de vivir. Eres la roca firme de tu construcción vital (Sandricuentos 519).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Los Sandricuentos son microtextos que están numerados para su identificación. Comente, comparta su nombre y no ponga enlaces con otras URL ¡Gracias! ©